El documento que nos ha ayudado a hacer esta práctica: CLICK AQUÍ
- En la
página 10 del documento podemos leer:
“ya podemos planificar esto o lo otro con todo detalle
que, en la práctica surgen mil imprevistos que nos obligan a improvisar, a
asumir riesgos, a someternos a las leyes de la inseguridad. Porque la dinámica
de un grupo-clase es, hasta cierto punto incontrolable y obliga al profesorado
a tomar muchas decisiones imprevistas e imprevisibles”
Las preguntas entonces son ¿qué pasa entonces con las
programaciones de aula? ¿Es importante entonces la planificación en la
educación? En caso afirmativo ¿Cómo habría de hacerlo? – a grandes rasgos o
aportar alguna idea general-
Las programaciones de aula son un instrumento de
trabajo que permite al profesor/a organizar su práctica educativa para articular
unos procesos de enseñanza y aprendizaje de calidad y ajustados al grupo y al
alumno/a, constituyen el tercer y último nivel de concreción del diseño
curricular. Es el espacio donde la individualidad y la experiencia personal
incidirán directamente en el diseño del currículo. No obstante, la autonomía
del profesor vendrá limitada por los acuerdos del departamento donde se han de
inscribir las diversas programaciones de aula.
Planificar es una tarea fundamental en la práctica
docente, pues permite unir una teoría pedagógica determinada con la práctica.
Es lo que nos hace pensar de manera coherente los aprendizajes que se quieren
enseñar a los estudiantes, porque si no se piensa previamente lo que se quiere
hacer, es posible que los alumnos y alumnas perciban una serie de experiencias
aisladas, destinadas a evaluar la acumulación de aprendizajes más que la
consecución de un proceso, es decir, se sientan mareados, se agobien y se
sientan desorientados con la asignatura sin llegar a comprenderla, y recopilan
información que para ellos esta desordenada y confusa, perdiendo así gran parte
de motivación y tomando estas enseñanzas sin seriedad.
La planificación es lo que se quiere hacer en teoría,
aunque no siempre resulte en la práctica. No obtener el resultado deseado no significa
que la plantificación no sea buena, sino que hay que modificar cosas de ella
según el contexto en el cual se trabaja y las cosas que vayan surgiendo, es
bueno seguir una estructura, que sea flexible, y no debe ser a principio de
curso necesariamente ya que a la hora de llevarla a la práctica nos surgirán
imprevistos. Como docentes debemos saber improvisar y no centrarnos en un
problema, sino en una solución, y más tarde una vez resuelto, analizar porque
surgió ese problema y rectificarlo en la programación e ir adaptándola poco a
poco en los puntos en los que haya que modificarla por cualquier cosa.
Para no quedarnos estancados es importante en la
educación, modificar las plantificaciones cada año, de acuerdo a los grupos con
los que se trabaje y su entorno, dando relevancia a las posibilidades del
centro, recursos digitales y nuevas tecnologías, integración de todos/as en el
diseño de las actividades, valores…y ayudar en lo posible a todos los que
participen manteniéndolos informados; como las familias, alumnado, comunidad,
coordinación con otros centros, docentes de otras clases…que pueden ayudar a la
profundidad para una educación de calidad, basados en la innovación educativa y
en una visión global de la realidad educativa de cada colegio.
¿Estás de acuerdo en que la autoestima del
profesorado, en general es baja? En caso afirmativo ¿A qué crees que se debe?
La autoestima del profesorado en general sí que es
baja, incluso hay mucho victimismo entre profesores, algunos lo utilizan para
descargar su frustración en cualquier entorno, porque realmente se sienten mal,
pero si se quejan de todo sin hacer nada por cambiarlo seguirán sumidos en la
incertidumbre y reflejarán en sus alumnos/as su sentimiento de fracaso
estancándose, cuando de otra manera y con una vista positiva, aparte de ser más
felices, pueden hacer muchas cosas de forma individual, sentirse libres y
ayudar a sus aprendices tanto como a ellos mismos.
No se ven capaces de afrontar problemas, no piensan en
innovar y hacer cambios productivos, sino seguir con la misma dinámica,
acomodándose y pensando que no funciona, culpándose ellos o culpando al sistema
educativo, administración y también pero en menos proporción a las familias
etc.
La mayoría del profesorado no está preparado para enfrentar
las dificultades que los niños en el aula presentan, deben empezar desde ellos
mismos a ser críticos y a evaluar su propio trabajo, plantearse nuevas maneras
de enseñar desde los recursos de los que pueden disponer.
Actualmente la sociedad cada vez tiene una mayor
necesidad de personalidades con actitud crítica, porque son las mentes
creativas que pueden elegir y, por tanto, las nuevas sociedades competentes
futuras.
Como docentes es importante que sepamos responder a
los numerosos y diversos problemas que nos hemos de encontrar en la realidad de
los colegios, niños con abusos, maltratos, pobreza, otra cultura…atendiendo por
individual y en su conjunto.
Siempre se la ha dado más importancia a la teoría que
a la práctica, pero esto ya no se demanda, cada vez es más relevante el enfoque
práctico, aunque todavía no nos hemos despegado del enfoque técnico del
modernismo.
Si tenemos quejas debemos luchar, para hacer frente a
los obstáculos ya que iremos hacia un progreso, y nos centraremos en las
soluciones y no en los problemas, de esta forma la autoestima sería positiva y,
por tanto, ayudamos a mejorar aquello con lo que no estamos de acuerdo,
llegando así a un estado de bienestar en el que trabajemos todos, con algo tan
sencillo como la voluntad y el sentido común.
De los 10 atributos del buen maestro de los que habla
Carbonell, ¿Cuáles serian a vuestro juicio los más importantes y por qué?
Para ser un buen maestro, según Carbonell, deben darse
10 atributos, si tenemos que escoger de entre todos sólo dos, es difícil, ya
que todos son importantes, pero a nuestro juicio, los dos que tenemos que tener
siempre presentes cada día, son los siguientes:
La formación permanente:
Es esencial en la labor de un maestro/a la formación
permanente, la retroalimentación constante, para aportarles a nuestros alumnas
y alumnos una información segura y actualizada, si nos quedamos anclados en el
pasado sin adaptarnos a las nuevas situaciones y a los cambios en nuestra
sociedad, no avanzamos, y si tampoco tratamos de conocer otras realidades
educativas, no podremos compararlas con las nuestras, y por tanto estaremos
dejando escapar muchísimas cosas y oportunidades que nos ayudaran en los
procesos de cambio, mientras que, añadiendo todo lo positivo que nos puedan aportar, mejoraremos y llegaremos
a una educación de calidad.
El saber hacer práctico:
Es primordial llevar siempre la
teoría a la práctica, para que el aprendizaje sea significativo y, por tanto, a
largo plazo. Hay muchísimos docentes con un gran potencial y formación, pero
que no saben aplicarlo a una clase, conocen su asignatura a la perfección y, sin embargo, no saben
enseñar y /o llevar a la práctica sus conocimientos, tenemos que saber
orientarnos para poder orientar, reflexionar para que ellos reflexionen y ser
autocríticos para que nuestros y niños y niñas crezcan con espíritu crítico, lo
que les ayudará a enfrentarse a cualquier situación sin quedarse en blanco y
poder defenderse ante el resto de la sociedad.
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